Nunca dejes de bailar
¡Buenos días! Queda una semana y un día para publicar mi
siguiente novela y estoy nerviosísima. Sí, lo sé, ya llevo un carrerón a mis
espaldas con varias publicaciones, pero para mí cada una de ellas es especial porque
me hace feliz ver a mis niños ahí, esperando para llegar a vuestras manos.
Es bonito verme por fin en la página de Planeta (enlace) con
esta historia romántica de segundas oportunidades y de amores predestinados que
marcan nuestra vida para siempre.
Me gusta pensar que en la medida de mis posibilidades he
alcanzado un pedacito de lo que esperaba cuando soñaba en imposibles y es
maravilloso porque a pesar de ser un logro pequeñito a mí me parece haber alcanzado
la luna.
El día quince estará a la venta y cuento el paso de los días
con muchísima ilusión.
Ojalá la historia de Maya y Prometeo os parezca tan intensa
como a mí y cuando lleguéis al momento en el que el título coja relevancia en
la trama os emocionéis como me sucedió a mí mientras escribía.
Sinopsis
Maya es espontánea,
feliz, despreocupada, fuerte… Encara la vida con positividad, buscando la
felicidad en los pequeños momentos, sin agobiarse con el rumbo que puedan tomar
sus decisiones. Aunque la vida le aseste golpes, ella siempre consigue quedarse
con la mejor parte de lo ocurrido. Cuando conoce al misterioso Prometeo, la
curiosidad la induce a acercarse a él, hasta que sus sentimientos se desbocan.
Prometeo es un hombre que guarda muchos secretos, tiene el
alma herida, y tanto su pasado como su futuro son dolosos. Oculta su identidad,
intenta parecer duro, no alterarse con nada porque no puede hacer promesas a
largo plazo, pero conocer a Maya desatará a un hombre pasional en su interior,
le enredará en una historia intensa con fecha de caducidad y se llevará para
siempre una parte de él.
¿Existe un amor capaz de perdurar más allá del ahora o
siempre será víctima del tiempo?
Falta poco…
¡Feliz día! J
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