A punto...
¡Buenos días! El sol me
acaricia desde la ventana mientras tecleo metida dentro de la cama. Es mi
ocupación favorita, la manera en la que pasaría el día entero, sin otra
obligación que novelar esas ideas locas que me colapsan los pensamientos. Mi
vida interior es tan intensa que muchas veces me olvido de la exterior.
Me resisto a terminar EDP.
Me quedan dos folios, pero no me pongo a ello, como si el hecho de poner el
punto y final me doliera. Mientras mi cabeza ya sabe qué pasará, mis dedos no
desean escribirlo, aunque ya tengo una idea de qué quiero escribir a
continuación.
Últimamente bato
constantemente mi récord. EDP empezó a escribirse el tres de diciembre y ahora
está a punto de culminar su periplo por la memoria RAM del ordenador. Sé que la
tarea de corrección será inmediata y que querré darle varias vueltas antes de
cerrar definitivamente el archivo, pero en realidad ya está, la creación se ha
terminado, los personajes deberán adaptarse a vivir libres y a continuar con su
vida sin que yo la sienta.
Con Los Mundos de Esme inicié un ciclo, algo que hace años deseaba
hacer. Una serie de novelas policíacas con una inspectora que investiga los
casos. Durante 2013 escribí tres novelas de la que yo llamo cariñosamente la serie Estrada. Tengo empezada la cuarta
y algún día la acabaré, pero mi cabeza necesitaba un cambio.
Con EDP intenté que la
trama fuera más intensa, que los crímenes y los misterios se intercalaran con
una profundidad distinta de los personajes. Ahora sé que es importante ampliar
algunas partes para conseguir el efecto deseado, pero que la parte final
consigue esa tensión que me propuse.
Cambiar de escenario, de
edad y de situaciones me ha ayudado a llegar a la conclusión de que no voy a
volver a la fantasía, pero que tampoco quiero escribir otro manuscrito de
crímenes. Deseo que mi próxima novela contenga un misterio, una persecución, un
secreto y mucha acción sin la necesidad de incluir un asesino en serie ni nada
parecido.
Bueno, como mínimo eso es
lo que le pido a mi cabeza mientras lentamente va dándole vueltas a mi idea
para transformarla en una historia con base sólida. Mi propósito para esta vez
es dilatar más en el tiempo la escritura, darle espacio para crecer y no
acabarla tan rápido (a ver si mi cabeza colabora…).
Ahora voy a colgar el post, voy a abrir EDP y voy a rubricar
un punto y final a la altura. Aunque en el fondo me da muchísima pena…
¡Feliz día! J
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