¡Buenos días!!! ¡Las fiestas ya están aquí! Deseo que paséis unos días extraordinarios en familia y que disfrutéis de la Semana Santa. Cuatro días seguidos de descanso es algo maravilloso, ¡así que aprovechadlo al máximo!

            Espero que hoy la lluvia se vaya con su cántico a otra parte. ¡A mí los días grises me apagan! Y estar aquí encerrada con tanta oscuridad se me hace largo y pesado. ¡Así que hago un llamamiento al sol! ¡A ver si nos ilumina con su luz!

            ¿Qué os pareció la entrevista de ayer? ¡A mí me pareció genial! Nieves parece una mujer llena de energía y vitalidad, con una fuerza creativa fuera de lo común y unas ganas intensas de compartirla con el mundo. Las respuestas fueron entusiastas, sinceras y con un toque de ilusión que se contagia, ¿no?

            ¡Permitidme un gran suspiro! ¡Cómo me gustaría contestar igual que ella a algunas preguntas! Nieves ha conseguido lo que yo sueño desde pequeñita: pasarse el día escribiendo, con fechas de entrega y varias novelas funcionando a la vez. ¡Es maravilloso saber que hay gente que lo logra! Y me alegro muchísimo por ella.

            Me encanta porque Nieves tiene muchísimos rasgos comunes a mí. Ella siempre inventaba diferentes finales a los cuentos y a los tebeos que leía en su niñez. Yo lo hacía con imágenes y todo, cada noche antes de cerrar los ojos me inventaba historias. A veces eran propias, otras eran inventadas y muchas eran sobre los libros que me estaba leyendo o las películas que había visto. ¡Era genial buscar finales alternativos!

            En cuanto a la música, durante años, cuando ponía música mientras escribía, acababa cantando y descuidando la trama. ¡También canto desde pequeñita! Aunque desafino un montón, por eso lo hago sin público. Siempre he tenido una memoria prodigiosa para las letras de las canciones, también es verdad que cuando me gusta una en concreto la escucho treinta veces seguidas para aprendérmela. Y una vez la tengo en la cabeza soy capaz de recordarla muchos años después. Por eso al principio la música me distraía, pero a medida que han ido pasando los años he sido capaz de disociar la escritura de la tonada y ponerme una selección de canciones de fondo mientras escribo (son siempre las mismas y en el mismo orden).

            Nieves consiguió algo maravilloso: publicar su primer libro sin esperas ni angustias. Es admirable que una editorial se interesara por ella tan rápido y que la vida le haya sonreído en ese sentido. Yo voy a seguir su consejo, me voy a seguir ilusionando con las novelas y con la posibilidad de llegar al lugar deseado. ¡La esperanza es lo último que se pierde!

            Nuestra entrevistada tiene una gran suerte al contar con un grupo de personas con las que poder hablar acerca de sus novelas, de sus personajes, de sus anhelos. ¡En este punto le tengo un poquito de envidia sana! En mi caso nadie de mi entorno lee ni está abierto a escuchar mis ideas ni mis argumentos, así que esa labor es solitaria. ¡Incluso carezco de lectores críticos! Así que yo me lo guiso y yo me lo como….

            Otra cosa que me gustaría comentar es que yo sí creo que el alma del escritor se destila entre sus escritos. A ver, vamos a puntualizar, es cierto que no se puede juzgar a una persona únicamente por sus creaciones, pero sí podemos encontrar patrones emocionales y una tendencia a dejar salir parte de sus traumas o ilusiones. De todas maneras estoy de acuerdo con Nieves en que a las personas hay que conocerlas personalmente para acabar de perfilarlas. ¡No todo se extrae de unas páginas donde inventamos!

            ¡Le deseo toda la suerte del mundo a Nieves! Lo repito, me ha encantado su vitalidad, su fuerza, su arrojo y su tesón. ¡Gracias por esta entrevista tan ilustrativa!

            ¡Pasad un gran día!