Y sigue ahí...
¡Buenos días! Parece que la vida me ofrece la posibilidad de vivir
un sueño, aunque solo dure unos días. Es maravilloso tocar el cielo con tus
manos, acariciar aquella ilusión infantil de saber que hay alguien escuchando
tus historias a través de las páginas.
No voy a basar mi felicidad en la consecución de unos objetivos ni
a desear lo imposible, es mejor emocionarse con cada peldaño y descubrir la
ilusión en los instantes, sin pensar en más allá de tu ahora para saborear el
efímero triunfo de llegar a los lectores.
Este blog no es solo un lugar donde moran mis letras, es como mi
diario de abordo, uno en el que comparto instantes, ilusiones y sentimientos. A
veces me dejo llevar por la emoción que me embarga al levantarme, sin pensar en
nada más, sin preguntarme cosas de mayor importancia, simplemente quiero dejar
constancia de mi despertar.
Ayer por la tarde volví a escribir. Tenía miedo de que la
promoción me absorbiera tanto que mi cabeza no colaborara a la hora de tejer la
trama de DUO, pero parece que la historia fluye con facilidad, como si quisiera
ser contada.
Escribo despacio, sin tanto ímpetu como en el último año y medio,
pero disfruto de la tarea de documentarme, de encontrar el tono perfecto a cada
escena y de sentir a los personajes crecer en mi interior. Son unos compañeros
de viaje muy intensos y me reportan muchísimas ilusiones.
Tengo a mis hijos en casa, el colegio ha terminado y estamos a la
espera de las dichosas notas. Espero que sean positivas… Supongo que ellos han
de encontrar la motivación para trabajar duro, pero como madre es muy difícil
ver cómo las cosas no salen bien.
El otro día los miraba y recordaba cuando eran pequeños, es
increíble el cambio que experimentan con el paso de los años y la época tan
rebelde en la que están. La adolescencia es quizás la edad más difícil, con
cambios físicos y hormonales, la necesidad de afianzar amistades y personalidad
y un sinfín de sensaciones a las que hacer frente.
Ellos han crecido y parece que yo también. Jejejeje, los años me
otorgan sabiduría, paciencia y serenidad. Por suerte ahora tengo claras mis
prioridades y sé que la vida es mucho más que estar pegada a la pantalla viendo
las actualizaciones del informe de ventas. ¡Hay que sonreír cada día!
¡Feliz día! J
Hola. Me ha gustado la reflexión que has hecho. Has conseguido que cambie de parecer. Gracias.
ResponderEliminarSoy una nueva escritora y siempre viene bien los consejos de otros escritores. Por favor, si puesdes, pásate por mi blog: http://nuriagbooks.blogspot.com.es/
Me gustaría saber que opinas como escritora de lo que he narrado.
Me he pasado por tu blog y lo considero muy interesante. ¡Seguro que consigues convertirte en una gran escritora! ¡Un beso!
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