Ilusión en las maletas
¡Buenos días! Parece que el sol vuelve a lucir con elegancia en el
cielo azul. Las temperaturas no son tan cálidas como los días pasados y parece
que al fin se respira aire de verano. Me quedan apenas tres días de trabajo
para empezar mis ansiadas vacaciones, ya casi siento el aroma sosegado de las
jornadas de asueto, sin el estrés laboral ni las obligaciones.
Tener trabajo es un bien escaso que debo mimar, la ilusión de
antaño de dedicarme únicamente a novelar mis ideas queda relegada a un lugar
lejano e inalcanzable, sin dolor, sin esperas y sin angustias. Escribir es
parte de mí, un impulso primario que me acompaña en el camino.
No se puede renunciar a lo que una es. En el pasado lo intenté, me
propuse dejar de escribir, arrancarme la necesidad imperiosa de darles vida a
mis personajes, pero es algo innato en mi interior, algo que me encanta. Ahora
sé que nada ni nadie me impedirá continuar con esa labor, aunque sea una
escritora con muchos o pocos lectores, siempre permitiré que mi creatividad se
evada hacia los folios vacíos.
Es increíble saber que tras cuarenta y un días Ecos del Pasado continúa dándome
alegrías. Me he propuesto pasar un largo periodo alejada de las redes sociales,
de Internet, del KDP… No sé si lo cumpliré a rajatabla, pero este viernes
cerraré el blog por vacaciones indefinidas para empezar a rebajar mis impulsos
cibernéticos.
Estaré muchos días sin casi cobertura, alejada del mundo
informático, inundada por libros en el Kindle, con un mundo nuevo por descubrir
y muchísima ilusión por viajar a Tailandia, un lugar que se me antoja
enigmático, diferente, exótico…
Respiro el aire viciado de la mañana, con el perfume de la
vegetación que arraiga en los parterres de mi terraza, unos cuantos pájaros
sobrevuelan la distancia frente a la ventana abierta, su aleteo se acompaña de
un canto armonioso y nítido. La casa duerme.
El día despunta para mostrarme la emoción de vivirlo, de sentirlo,
de permitir que la ilusión dirija mis pasos mientras me adentro en los últimos
días de trabajo antes de partir hacia lo desconocido. Es agradable la sensación
de que pronto dejaré las obligaciones para abrazar las emociones.
Seguro que de este viaje salen ideas para una novela de aventuras
y amor…
¡Feliz día! J
0 comentarios: