¡Maldita lluvia!
¡Buenos días! Ayer por la tarde la única tromba de agua que cayó
del cielo acabó sobro mi cuerpo indefenso. Salí de casa para ir a mi clase de
baile con Fran, hacía un resol estupendo, así que me subí a la moto sin pensar
en la lluvia de la mañana. En el primer semáforo repiquetearon varias gotas en
la acera con una cadencia suave. En el segundo eran una cortina de agua que se
empeñaba en mojarme.
Llegué al gimnasio empapada, pero no quería renunciar a la clase,
así que me cambié de ropa, guardé la camiseta y los pantalones mojados en la
taquilla y subí a la sala donde mi querido Fran tenía preparada una coreografía
espectacular.
Necesitaba esa hora de desconexión tras un día apagado como el
tiempo. Hay cosas que no deberían extrañarme ni afectarme, pero soy una
sentimental que siempre quiere ver la parte buena de las personas y sigo sorprendiéndome
con algunas actitudes.
Salí de la clase como nueva. Fue una gimnasia física y mental de
aquellas que te demuestran que por muy mal que te vaya un día al siguiente
siempre sale el sol. Y así es, mi ventana muestra un cielo azul, el sonido es
sereno, las hojas de mis árboles de la terraza se mueven al son de un viento
suave que parece fresco y los pájaros llenan el silencio matutino con su canto.
Tras la ducha me vestí con la ropa empapada y me fui a casa
tiritando. Ya no llovía, pero la temperatura exterior había bajado. Mi sonrisa
era plena, ¡hay tantas razones para sonreír cada día! Una vez en casa me puse a
cocinar albóndigas para comer hoy, arroz y carne para cena y una gran ensalada
para mí. ¡El día acabó genial!
Hoy me siento renovada. Ecos del Pasado se mantiene en el puesto
treinta y tres del Top100 de Amazon. Lleva diecinueve días ya de descargas
continuadas… No voy a consentir que nada ni nadie empañe mi ilusión, porque
saber que está ahí, que vosotros continuáis dándole una oportunidad a Jessie y
a Noah, me llena de una felicidad quimérica que pocas veces se alcanza.
Mientras dure el sueño lo viviré con emoción. Cuando termine
cerraré los ojos y recordaré estos días para despertar nuevas sonrisas.
Esta tarde tengo prevista una visita con medicina tropical para
que nos asesoren acerca de los medicamentos necesarios para viajar a Tailandia
y que nos vacunen en caso de necesidad. Aixxxxxx, ¡con lo que odio las agujas!
Espero que no sean demasiados pinchazos…
Mañana os cuento…
¡Feliz día! J
Tal vez esas actitudes que no dejan de sorprenderte y que te causan la misma sensación que los días grises y de tormenta sea como consecuencia de que estás acostumbrada a que las demás personas te doren la píldora. ¡Dios me libre de verme rodeado de esa clase de "amigos"! Prefiero sufrir por una realidad a ser feliz con una sarta de mentiras: lo mejor que un amigo puede ofrecer a otro no es otra cosa que la sinceridad, y cuando no es así no se trata de amistad , sino de interés.
ResponderEliminarNo te preocupes ni siquiera es necesario que te molestes en responder: sé y soy consciente de que todo lo que aquí escribo es leído por ti y ¡Ojalá que el tiempo que te dedico no caiga en saco roto!
Creo que tenemos una visión distinta de las cosas. Mis amigos son personas críticas que evidentemente me señalan los errores en mis novelas y en la vida. Me encanta que me digan lo que realmente piensan y no sólo me administren píldoras de alegría, solo señalarte que normalmente lo hacen en privado.
EliminarTú y yo no somos amigos. Agradezco tu interés en ayudarme, aunque considero que ni el modo ni el medio es el adecuado. Si de verdad quieres ayudar hay muchísimas maneras para hacerlo, pero esta no es la adecuada.
Saludos.
¡Vaya! la verdad es que, la que no dejas de sorprenderme eres tú: nunca imaginé que mis comentarios hubieran de ser aprobados, eso, por si no lo sabes, tiene un nombre: cuando alguien coarta la libertad de expresión de otros se convierte en un dictador.
ResponderEliminarAunque este es mi blog y no estoy obligada a dar explicaciones a nadie del porqué de una decisión, te diré que he decidido poner un cierto control en los comentarios, sobre todo para cuando vaya de vacaciones. No me gustaría que se llenara de anuncios o información indeseable sin poder mirarlo. Nunca he tenido interés en coartar la libertad de expresión, pero prefiero controlar y leer de antemano los comentarios que van a publicarse. Creo que debo ser precavida por si acaso entrara alguien de una editorial, aunque no lo escribo de manera profesional.
EliminarA día de hoy no te he filtrado ningún comentario, pero si no te gusta este blog no estás obligado a leerlo.
Un saludo,
Pat
Me parece que como "escritora" no estás tratando a un lector con el debido respeto que se merece. No te preocupes, no solo dejaré de postear aquí, sino que también dejaré de leerte.
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