Sí, no...
¡Buenos días! Parece que el sol ha emigrado
durante unas horas a otra parte del globo terráqueo, pero el calor húmedo de
los últimos días sigue empeñado en llenar las calles. Uffff, ¡con lo bien que
se estaba en la montaña! Allí como mínimo la temperatura nocturna es más agradable.
Tengo ganas de dormir de un tirón de nuevo, de relajarme,
de no sentir el calor sofocante durante la noche. A ver si las tres semanas de
vacaciones lo logro… Ahora mismo solo me apetece irme a remojar a una piscina o
a la playa, sin salir del agua en toda la mañana.
Hace tiempo que no sentía el tic tac del reloj
martillear con esta insistencia. Estoy dubitativa, y es malísimo para mi salud
mental. A veces las preguntas esperanzadas se suceden en mi mente, arrancándome
sonrisas absurdas. No puedo construir castillos en el aire, porque cuando se
caen arrasan con mi serenidad.
Una vocecita interna me dice: «si las dos
editoriales están calladas y no responden a tus emails es que como mínimo no
han descartado directamente la publicación». Y sí, quizás es cierto, pero
también puede pasar que me digan no en algún momento. Así que estoy otra vez
delante de la encrucijada.
¿Presento Dúo
al concurso o no la presento? Es como si tuviera una margarita en la mano y le fuera
arrancando los pétalos mientras recito mentalmente sí, no, buscando una
respuesta coherente a la pregunta que formulo constantemente.
El viernes es el día D. Elegir un camino puede
obstaculizar el otro, y en el fondo siento vértigo. Quizás debería cerrar los
ojos, inspirar una bocanada de aire y lanzarme al vacío, sin pensar tanto, sin
darle tantas vueltas. Dúo es una gran
novela, con dos romances, una saga familiar y una historia cargada de momentos
álgidos.
Ojalá la vida tenga reservada una buena noticia esta
misma semana, aunque en realidad es una tontería esperarla, porque en julio no
llegan ese tipo de noticias. Jejejejeje, suerte que en pocos días nos vamos de
vacaciones, porque si sigo así volveré a entrar en la espiral de esperas
absurdas.
Sin embargo no estoy ansiosa ni frustrada ni
desesperada. Si el viernes no llega la respuesta cerraré los ojos y le daré a
enviar, presentando Dúo a uno de los
concursos y PELN al otro, y que sea lo que haya de ser. Total, el día uno de
agosto cerraré el ordenador y lo mantendré en pausa hasta el veinticuatro…
¡Feliz día! J
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