¿Qué hay que llevar en la maleta para viajar a Tailandia?
¡Buenos días! Tras unos días
grises, más propios de finales de octubre que de esta época, parece que el sol
quiere alumbrarnos la jornada. Respiro serenidad desde que regresé de mi viaje,
ahora ya no me tomo las cosas tan a pecho e intento buscar soluciones a los
problemas en vez de permitir que me ofusquen. Hoy iniciaré otra vez mis clases
de baile, tengo unas ganas…
Algo muy importante a la hora
de preparar un viaje es saber qué hay que llevar en la maleta. A mí ese punto me
agobiaba un poco, porque a pesar de recorrer varias páginas Web y blogs no
acababa de verlo claro. Al final hice un mix entre las sugerencias y acerté.
Al volar dentro de Tailandia
con compañías de bajo coste debíamos pensar en el peso de las maletas, era
importante no superar los veinte quilos. De las tres compañías dos tenían esa
franquicia dentro del precio base y la tercera, Nok Air, te daba quince, pero
por el módico precio de dos euros la ampliaba a veinte.
Evidentemente optamos por
llevar cuatro maletas: tres medianas y una grande. Eso supuso una inversión
nada desdeñable, la única que teníamos válida era la grande. La parte positiva
es que ahora tenemos una maleta cada uno y que son de buena calidad.
Una vez superado ese escollo
había que pensar en las necesidades del viaje. A parte de ropa de verano, el
calor en Tailandia es húmedo y pegadizo, había que tener en cuenta que visitábamos
destinos diversos. Necesitábamos unos zapatos de montaña para el norte, unas
sandalias bien abrochadas para el sur y unas bambas cómodas para andar por
Bangkok. A parte también era aconsejable llevarse unos tejanos para el
trekking, un jersey para el avión, pareos para cubrirse las piernas en los
templos, toallas que no pesaran para las excursiones, un par de mochilas,
camisetas de manga corta para las visitas a los budas, bañadores y un buen botiquín. Y, sobre todo, no puede faltar un chubasquero para los posibles aguaceros.
Lo utilizamos absolutamente
todo y no echamos nada en falta, cosa que nos dio la pista inequívoca de que lo
hicimos bien.
Para llenar el botiquín fuimos
al consultorio de medicina tropical de Barnaclínic. Ahí nos vacunaron y nos
dieron información acerca de los viajes al trópico. Como los niños tenían el
carnet de vacunaciones al día solo les pusieron la tifoidea. A mi marido y a mí
también nos tocó una dosis de tétanos y otra de hepatitis A y B.
En la farmacia de mi prima
compramos un surtido de medicamentos. Repelente de mosquitos potente, aunque
solo me picaron dos y me olvidé de rociarme casi cada día, un antidiarreico por
si acaso, una pomada para aliviar las picadas, una caja de antibiótico,
ibuprofeno y crema solar factor cincuenta (súper importante porque Tailandia
está cerca del agujero de la capa de Ozono y el sol es muy fuerte).
Nos recomendaron levar suero
oral, pero mi prima nos aconsejó que si teníamos mucha descomposición optáramos
por beber Aquarius o coca-cola. Esta última consiguió que yo me restableciera
el último día, tras una noche devolviendo.
Mañana entraremos ya en materia…
¡Feliz día! J
0 comentarios: