¡Segundo día de trabajo!
¡Primer día de trabajo superado con éxito! Tengo un montón de trabajo y poco tiempo, pero ayer conseguí despejar la mesa, ordenar los papeles, descifrar el flujo de caja de estas últimas semanas, arreglar un par de asuntos súper importantes y empezar con la tarea urgente que me estaba esperando…. ¡No está mal!
Hoy toca empezar en el otro trabajo. ¡Tener dos quiere decir dos “reentrés”! El de hoy es un poquito más aburrido: estoy completamente sola en la oficina y la tarea en sí es un poco más monótona, pero también tiene sus ventajas. ¡Estoy segura de que si las buscas, encuentras ventajas a todo lo que haces! ¡Probadlo!
Ayer por la tarde empecé con mi primera clase de baile tras tres semanas de soling, panxing y mucha musculación de mandíbula. ¡Me duelen todos los músculos del cuerpo! ¡Creo que no me queda ni uno sin agujetas! Es que pasarme veintitrés días sin hacer ejercicio tiene su castigo.
¡La clase fue genial! ¡Cómo he añorado los pasos, mis compañeras, los ánimos del profe! Es que ya os he dicho que todo tiene ventajas y volver a Barcelona para recuperar la rutina me devuelve a mis queridas clases de baile. ¡Por poco que pueda esta tarde repito!
Si os digo la verdad lo de bailar es como una terapia casi tan buena como ir al psicólogo. Te pasas una hora de reloj sintiendo la música y muy consciente de los pasos. Para mi cabeza es un relax total, ¡deja de pensar una hora! ¡Y no le da vueltas a nada! Sol amente se dedica a sentir, contar pasos y bailar, sin tramas ondeando ni problemas asomando ni obsesiones increpando. ¡La música, los pasos y yo!
Por la noche me fui a cenar con mi marido al Cornelias, ¡esto de estar solos es genial! ¡Aunque si seguimos así me arruino! El restaurante me gustó, los camareros fueron increíblemente amables, el ambiente es inmejorable y la comida no estuvo mal. ¡Así que otro día repetiré!
Entre tantas cosas que hacer también encontré tiempo para corregir, aunque sólo un capítulo. Estoy en la página 193 de 234, ¡me queda tan poquito para acabar con la primera revisión! A ver si sigo encajando las piezas del horario para seguir con esta tarea.
Ya os dije que abandoné mi obsesión. Estoy feliz de trabajar y de sentirme realizada con lo que hago, pero en el fondo de mi corazón deseo que mi otro trabajo me lleve a algún sitio, que pueda llegar adonde yo quiero y que me reporte una plenitud inimaginable. ¡Y para eso hay que dedicarle horas y esfuerzo!
Pero prometo mantener la ilusión y el optimismo, eso que normalmente tengo y que en un momento dado se escurrió por una alcantarilla para dejarme seca de emoción. Y al día siguiente fue como el resurgir del Ave Fénix y volvió a mí con una fuerza tal que arrasó la angustia, la ansiedad y la obsesión que dominaba mi vida.
¡A ver si encuentro tiempo para leer también! ¡Ufff, cuántas cosas! No sé yo si debería pedir que el día se alargara y me regalara unas horitas más, por eso de alcanzar a todo lo que me he propuesto.
¡Pasad un gran día!
Paaat!!! Vuelveeeee!!! M
ResponderEliminarI'm sorry!!!! Tengo muchísimo trabajo aquí, pero mañana vuelvoooooooo. Un besito para todossssss!!!!! ¡Estoy en el mail!!!
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