¡Malditas ideas locas!
¡Buenos
días! ¡Sol, ilumíname! Ayer tuve un día muuuuuuuuuuuuuuy disperso, un poco más
y me doy al tequila como me proponía uno de mis comentaristas en Facebook…
Uffff, empecé con la receta del brownie y en vez de continuarla salté a la de
las croquetas, y me salió un churro que pa qué.
La
culpa de mi dispersión es la falta de inspiración y las mil cosas que ocupan mi
cabeza estos días. Está claro que tengo un exceso de imaginación y que siempre
le doy un final idílico a las situaciones… ¡Si me he pasado tres semanas soñando
en príncipes azules! Y la realidad es que al final se convierten en rana…
Jejejeje.
Es
absurdo sentir el peso de los acontecimientos ajenos como si fueran propios y
desanimarse porque las cosas no han salido igual que la película ideada por mi
ensueño desbordado, lo sé. Pero así soy yo, me encanta pensar que la vida es
emocionante, que las pequeñas ilusiones prenden en una llama eterna y fabulosa,
que existen los flechazos…
En
realidad las personas no sienten de esta manera tan intensa y no anclan su
cerebro a las ideas locas que me acompañan a mí, por eso tengo facilidad para
crear tramas, me emociono con las historias y consigo entrar en la psique de
mis personajes para vivir sus aventuras… ¡Ojalá la vida fuera tan sencilla como
escribir en palabras lo que te quema por dentro!
Ando
completamente atacada por las historias que se empeñan en ocupar mis horas.
Parece que la escritura de mi novela actual es un revoltijo de instantes en los
que no acabo de ahondar. Es como lo de ayer, empiezo haciendo un Brownie y continúo con las croquetas sin
cambiar de bol…
Necesito
centrarme, cerrar ese capítulo de ideas locas y delirantes, aparcar las quimeras
imposibles y caminar de la mano del realismo. Pero es tan bonito sentir que las
cosas fluyen… ¡Basta! Creo que necesito un reset
urgente para mi cerebro, que ahora tiene tres historias en marcha y no consigue
desarrollar ninguna.
Como
no estabilice mis pensamientos explotaré… Creo que esta noche haré un parón y
me tomaré un par de copas de vino (no me gusta…), como me achispo con una, la
segunda será de relleno y conseguiré desenchufar mi cerebro durante unas
horitas…
Supongo
que debería colgar los hábitos de escribir durante unos días y dedicarme a
leer, tal como me proponía… Esta tarde lo tengo chungo, pero el fin de semana
cargaré mi Kindle con munición y me dedicaré a la lectura desenfrenada, a ver
si me sereno…
¡Feliz
día! J
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