¡Un gran fin de semana!
¡Buenos
días! Tras un fin de semana maravilloso vuelvo a la rutina… En una hora estaré
en la oficina trabajando en mil y una cosas, pero ahora tengo un ratito de
relax con el ordenador.
El
viernes nos fuimos solos mi marido y yo a la montaña, mi hija estaba con gripe
y Álex decidió quedarse con ella y mis padres para salir con sus amigos. Es
emocionante pasar dos días tranquilos en pareja sin niños, aunque si son demasiados
me arruino…
Fue
una grata experiencia. El viernes nos fuimos a cenar al Wok de Puigcerdà antes de irnos a casa a deshacer las maletas. Nos
dormimos pronto para madrugar, queríamos ir a Andorra a esquiar y si te
levantas muy tarde el día no cunde.
El
sol lucía en un cielo azul cuando me desperté el sábado. Hacía frío, pero era
soportable, y las montañas se llenaban de nieve caída durante dos semanas de
borrasca y bajas temperaturas. Llegar al Pas de la Casa no fue complicado, pero
una vez en el pueblo impera el caos. Me pareció increíble que los policías no
controlaran el tránsito de alguna manera y que los coches se pararan en
cualquier lugar entorpeciendo la circulación.
Llegar
a Andorra desde Estavar son tres cuartos de hora, conseguir estacionar el
coche, en un parking de pago, nos costó otros tres cuartos de hora. La verdad
es que entre el precio del forfait,
el caos circulatorio, que en todo el pueblo el aparcamiento sea pagando, la
comida mala y cara de las pistas y lo dejado que tienen las calles, no sé
cuánto voy a tardar en volver. Porque aunque se esquíe bien, el coste que
supone no es razonable.
Las
cinco horas de esquí fueron fenomenales. Las primeras bajadas mi rodilla se
quejó, pero a medida que me deslizaba por la nieve el dolor desapareció. Nos
pusimos los esquís a las diez y cuarto de la mañana y nos los sacamos a las
cuatro y cuarto.
De
todas las bajadas la que me dejó mal sabor de boca fue la última. Nos metimos
sin querer en una pista negra llena de hielo y mi cabeza me jugó una mala
pasada... Cuando me rompí los ligamentos cruzados fue una caída en una placa de
hielo y el médico me dijo que este año todavía era pronto para forzar tanto…
Total que me bloqueé al principio. Luego empecé a virar lentamente y vi que
podía, así que al final bajé sin problemas.
Y
ayer nos tomamos el día de descanso. Nos despertamos tarde, paseamos por Llívia,
tomamos un aperitivo al sol, preparamos las maletas y nos fuimos a comer a un
restaurante de Ribes de Freser. ¡Fue un día muy agradable!
He
trabajado en la novela este fin de semana. Pensaba que con unas cuantas páginas
más la historia se cerraba, pero a medida que avanzo me doy cuenta de que no
puedo terminar sin solucionar una serie de cabos sueltos, así que voy a
permitirle a la trama que continúe un poquito más para que el final sea
adecuado.
¡Feliz
día! J
Feliz día, feliz semana :-)
ResponderEliminar¡Igualmente! :-)
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