De la A a la Z: ¡La J!
¡Buenos días! Soy un año mayor… Ayer era mi cumpleaños y
decidí no escribir en el blog para tomarme unas mini vacaciones de escritura.
Fue un día perfecto, con desayuno en el trabajo acompañada de mis todos compañeros,
una cena con dos amigas, una tarde en la terraza de casa tomando el sol y
leyendo… ¡Todo impresionante!
Voy a dejar constancia de las cuatro categorías con la letra
J.
Una película
Hay una frase que se repite en Cuando estoy sin ti y en Mi
vida sin ti. Viene de labios de Steff y me encanta porque es muy ella: ¡Ni Barry ni Jason Bourne ni Edward Cullen
ni Damon Salvatore ni Jace Herondale ni Ethan Hunt ni hostias! Pues bien,
el primero de la lista es de una película que me encanta, cada una de sus
entregas.
La acción es uno de mis fuertes cuando voy al cine y el
espía que pierde la memoria de la primera peli me enamoró hasta convertirse en
uno de mis ídolos. Matt Damon es uno de mis actores preferidos.
Una serie
Los militares me interesan desde hace muuucho tiempo. Y si
encima son abogados de la marina como en JAG:
alerta roja, se ganan un pedacito de mi corazón.
En otra vida debí ser alguien cercano a ellos porque me pasé
años frente a la tele descubriendo las peripecias de Harmon, Sarah, Anthony,
AJ, Bud y el resto de personajes de esta serie con diez temporadas de duración.
Un libro
Ha sido difícil la elección ya que hay pocos que empiecen
con ese nombre, pero enseguida he recordado mi época de juventud en la que devoraba
novelas de misterio como si fuera una loba hambrienta.
Tom Clancy era uno de mis autores favoritos y Juego de patriotas me apasionó, tanto en
su versión literaria como en la cinéfila, con un Harrison Ford increíble.
Siempre me ha parecido increíble la capacidad de algunos
autores para idear historias complicadas de mucho misterio y con giros
alucinantes como en esta. A lo mejor vuelvo a leer este tipo de libros algún
día…
Una canción
En 1994 James Ingram lanzó Just once, una canción que habla sobre cómo una relación puede
llegar a su fin y seguir así durante un tiempo. Esos adioses que nunca son definitivos,
esa sensación de que la relación se escurre entre los dedos y la nostalgia de
los buenos momentos, cuando ambos eran uno y la felicidad irradiaba de sus
rostros.
Está en la banda sonora de ECDA, una novela de la que pronto
os hablaré. Su historia esconde un millar de instantes que me hicieron suspirar
con la ilusión de contar algo distinto, de inventarme un país con unas reglas distintas…
¡Feliz día! J
0 comentarios: