Insomnio

9:09 Pat Casalà 0 Comments

¡Buenos días! El insomnio crónico es algo común en mi vida. Antes era difícil de gestionar, pero ahora ha pasado a formar parte de mí de tal forma que soy capaz de funcionar al cien por cien cuando tengo una noche como esta.
Supongo que mi hiperactividad cerebral no ayuda a la hora de conciliar el sueño, y menos cuando tengo varios proyectos en marcha y necesito concentrarme en ellos. Eso induce a mi cabeza a no parar ni un segundo los engranajes.





Hoy, a las tres de la mañana, estaba mirando la tele porque a mi cerebro inquieto le ha dado por repasar de forma intensa dos de mis frentes abiertos: el final de la bilogía AAA y las ideas de mi sesión de brainstorming de ayer.
Y sí, era un poco demasiado machacón el tonillo pesado de mis pensamientos porque me di cuenta de dos cosas demasiado importantes para pasarlas por alto. 


Si algo he aprendido después de toda una vida conviviendo conmigo misma es que si no soluciono las cuestiones que mi cerebro plantea sobre las tramas no logro serenarlo. Y menos cuando se trata de incongruencias temporales o de cambiar una historia que está clara para mí para integrarla en otro formato.
Total, que he acabado viendo la serie que ayer me mandaron para «deberes». Tiene seis capítulos y ya he visto cuatro. Porque es importante aprender y no dejar nunca de escuchar a los demás cuando quieres algo, pero no dejo de tener miedo al fracaso porque mi formato de los últimos veinte años ha sido claro: novelar mis mundos paralelos.


Sin embargo, estoy súper ilusionada con mi nuevo proyecto, sin olvidar mis novelas ni mi intención de acabar la bilogía (no voy a dejar a Alba, Amelia y Alonso sin su final…), aunque quizás deba aprender a compartimentar todavía más mi cerebro porque llevar dos tramas de ese calibre en mi cabeza me despierta por las noches.
Volver a reencontrarme con Bruno, Aurora, Emma, Ritter, Marianne… darle una vuelta de tuerca a la historia, encontrar nuevos rumbos, nuevos personajes, quizás, y una nueva manera de enfocar cómo explicarlo es un reto. Y yo adoro los retos. Aunque no me dejen dormir.


Así que quizás siga sin dormir demasiado un largo tiempo. Y la verdad, me da igual dónde llega después este proyecto, porque lo mejor es el camino, aprender, absorber conocimientos, descubrir cómo cambiar mi cabeza para adaptarla a algo totalmente nuevo mientras no me olvido de mis ganas de escribir con intersección y la grandeza de novelar.
Porque cuando escribo un libro soy la titiritera total, domino cada ángulo de la situación y veo en mi mente cómo interactúa cada uno de los personajes, qué expresiones hacen, cuáles son sus sentimientos y sus motivaciones… Y eso me encanta, a pesar del enorme esfuerzo sentimental que muchas veces entraña.
Espero tener éxito en mis actuales proyectos…
¡Feliz día! J

You Might Also Like

0 comentarios: