¡Susto superado!
¡Buenos
días! La vida es un sinfín de momentos que te demuestran lo valioso de tu
entorno. A veces nos amargamos pensando en lo que no fue y no valoramos
suficiente lo que sí ha sido.
Parece que
nuestra familia está predestinada a sufrir sobresaltos en los hospitales, que
el hecho de entrar en un quirófano nos acerca a las desgracias y que tenemos el
gordo en la lotería de posibilidades remotas…
Mi cuñado se
murió a los 32 años por culpa de una infección hospitalaria y la falta de tino
a la hora de diagnosticarla. Fue un golpe duro, increíble, lleno de situaciones
kafkianas que algún día explicaré si me hermana me lo permite. Grotesco, eso
define lo que pasó. Me parece increíble que en pleno siglo XXI sucedan
despropósitos tan horribles con tanta impunidad. Pero la impotencia que se
siente ante actos parecidos no puede luchar contra el corporativismo.
Superamos
esas desventuras, unos más rápido y otros con dificultad. La verdad es que es difícil
quedarte viuda a esa edad… Pero la vida sigue y la fortaleza de mi hermana ha
logrado ayudarla a caminar por el sendero de la superación, cada día sonríe un
poco más y en pocos meses verá cumplido su sueño de convertirse en doctora en
biología. Su especialidad es la oncología infantil. ¡Está predestinada a
descubrir algo grande!
En mi
operación de ligamentos cruzados del año pasado me sucedió algo que las
estadísticas denominan como extraño. Me pasé la noche con temblores, agitación,
castañeteo de dientes, hinchazón de la lengua y con la mandíbula desencajándose
sin parar. Yo pensaba que tenía una crisis de ansiedad, así que no dije nada
hasta que durante la mañana los síntomas se agravaron. ¡Tenía alergia a un
medicamento! Al final la enfermera, pautada por el médico de urgencias, me
inyectó un antídoto.
Y llegamos
al caso de mi padre, a su parada cardiorrespiratoria en mitad de una operación
rutinaria, a la desgraciada mala suerte de que se le reventara una membrana y
el líquido salino de limpieza le llenara la cavidad abdominal y le produjera una
peritonitis química. UCI, hinchazón general, coma inducido, respiración
asistida… Cuando mi hermana lo vio tuvo una regresión, nos asustamos tanto…
Pedí consejo
a una persona con la que trabajo y en quien confiaba, pero como siempre los
demás no responden como a ti te gustaría y no me ayudó. ¡Ya os he dicho que soy
idiota por confiar demasiado en los demás! Siempre hago lo mismo, espero que
reaccionen como lo haría yo, que me tiendan una mano y que sean próximos…
¡Sí conté
con la cercanía de amigos y amigas maravillosos que estuvieron preguntándome
por Whatsapp en todo momento! ¡Y con otros que me preguntaron a través de email o el FB! ¡Y no faltó mi querida M. desde Suiza! ¡Gracias chicos!
Por suerte
mi padre es una persona fuerte y su cuerpo venció la infección con la ayuda de
los antibióticos y los cuidados increíbles de los doctores de la UCI. Ahora ya
está en una habitación con mi madre recuperándose del susto.
¡Feliz día! J
¡Me alegro muchísimo de que todo quedara en un susto!! Mi familia es asidua a los hospitales y odio la incertidumbre y el miedo que se pasa en los momentos de espera. Entiendo el trance por el que pasasteis y ojalá no se repita nunca.
ResponderEliminarUn beso muy fuerte para todos. :)
¡Mil gracias María! ¡Un beso!!!
EliminarUn feliz sábado.
ResponderEliminarMe alegra que todo vaya mejor.
Un beso :-)
¡Un beso grande! :-)
EliminarHace unos pocos meses mi suegro no tuvo tanta suerte ni fortaleza, y la reacción alérgica a un contraste le provocó también una parada cardiorrespiratoria que tras varios días no pudo superar.
ResponderEliminarA veces tiene que ver la incompetencia, pero a veces también el destino juega malas pasadas.
Por eso me alegra mucho que lo vuestro haya quedado en un susto.
Un abrazo y ¡feliz día!
¡Muchas gracias Fernando! ¡Un abrazo! Espero que la próxima vez el destino juegue a tu favor...
EliminarNo tenía ni idea. Me alegro que haya quedado todo en un susto. Un beso para todos.
ResponderEliminar¡Gracias guapa! :-)
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