¡Cantar y bailar!
¡Buenos
días! Esta semana me siento más optimista que nunca… ¡La vida es genial! Dejar de
lado las esperas y saber que cada día te puede reservar una sorpresa me ayuda a
sonreír y a ver las cosas desde un nuevo prisma. ¡Intentadlo!
Ayer
fui a bailar, como cada lunes. Fue una clase genial, con mucho ritmo, canciones
de mi juventud, emociones y risas. ¡Así quiero que sea mi día a día! Lleno de ilusión,
buenos momentos y mucha alegría… Me pasé la clase de baile cantando a viva voz
mientras me movía, sonriendo, emocionándome y desmelenándome. ¡Fue una hora
genial!
Al
llegar a casa preparé la cena y la comida de hoy canturreando y bailando,
¡estaba feliz! Y después de cenar los niños y yo nos pusimos a mirar álbumes de
fotos de cuando era jovencita. ¡Nos reímos tanto! Salíamos mi marido y yo
vestidos de los noventa, con bermudas altísimos de tiro, largos y con pinzas…
¡Y los tejanos que llevaba yo eran increíblemente anchos!
Recordé
el viaje a Bali, la luna de miel en Nueva York y San Francisco, el verano en
Zermat, la escapada a París, el nacimiento de los niños, sus primeros años…
¡Qué emociones más intensas! Me encantó verme sonreír en las fotos, descubrirme
con otras ilusiones y saber que puedo volver a ser esa jovencita con la cabeza
llena de sueños.
A
ver si este verano podemos escaparnos los cuatro a algún lugar y crear un nuevo
álbum de fotos, uno que miraré de aquí unos años y me hará sonreír, igual que
el del crucero de éste último agosto.
Esta
semana los días son intensos, con un montón de obligaciones diarias y
muchísimas actividades de lo más diversas. La escritura queda relegada a un
segundo término… Mañana es un día decisivo en muchos aspectos, pero a
diferencia de otras ocasiones no estoy nerviosa ni agobiada, más bien tengo
claro que no hay novedades significativas. ¡Es lo que tiene no esperar, que te
das cuenta que una reunión no te aportará lo que tú deseas! Y que quizás solo
sea una más de una larga lista…
¿Quién
puede conocer su destino? ¡Marta Noguera! Jajajajaja. Es una liberación saber
que no espero nada de mañana ni de pasado ni del otro, simplemente recibo lo
que el día tiene reservado para mí. Y quizás algún día me llegue otro sí… ¡El
primero lo tengo reservado para dentro de un par de años! Así que a ver si
tengo otro antes…
¡Feliz
día! J
Feliz día :-)
ResponderEliminarMe pasa como a ti (lo decías ayer, creo): por las noches se me cierran los ojos muy pronto, demasiado pronto y no puedo seguir la historia con la velocidad que me gustaría. Segunda parte de "los cristales" empezada. Totalmente enganchada a la historia... mira que si al final haces que me guste lo paranormal y lo fantástico ;-)
Pues eso de que se te cierren los ojos es un rollo... ¡Feliz día! :-)
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