Centros comerciales de Bangkok

7:07 Pat Casalà 0 Comments

¡Buenos días! El viernes hice campana de escritura… Fue por una buena causa, mi amiga embarazada no se encontraba bien y la llevé a urgencias, por suerte no era más que una pequeña molestia que con un poco de reposo se soluciona.
Pasarelas elevadas que conectan los centros
El fin de semana ha cumplido sus expectativas de descanso, serenidad y buena sintonía con las montañas. A veces ese oasis de paz me ayuda a relajarme y a desconectar de las realidades que no me gustan. Aunque tengo claro que si quieres algo de verdad no puedes quedarte sentada en el sofá esperando a que suceda.
Luchar, esa es la única vía para alcanzar un pedacito de tus aspiraciones. Y en eso estamos… ¡No solo en la escritura!
¿Volvemos a Bangkok?
Nos quedamos en el hotel, de vuelta del Palacio de Dusit. Nos paramos a tomar algo en una zona de comida cercana al muelle, donde había un sinfín de paradas que ofrecían diversos platos. Nosotros optamos por dos Pad Tai de gambas y dos de arroz frito con pollo.
Interior del MBK
Para quitarnos un poco el calor nos bañamos en la preciosa piscina con vistas al río, con los vasos de agua, hielo y limón servidos por unos atentos camareros y la conexión wifi en nuestros aparatos electrónicos. Planeamos el resto del día mirando mapas y opciones.
Una vez duchados y arreglados nos fuimos en skytrain a la zona de las galerías comerciales. Llegamos a un lugar donde había varias pasarelas superpuestas que se alargaban sobre la ciudad, llevándonos de un centro comercial a otro.
Visitamos por encima el Siam Paragon, un establecimiento repleto de tiendas de primeras marcas al que no le sé encontrar un símil europeo. Sería como si juntáramos los comercios que se extienden a lo largo del Paseo de Grácia de Barcelona en un centro comercial. ¡Me encantó verlo!
Luego caminamos por dentro del Siam Center, donde se agolpan tiendas asiáticas y de un precio medio. Rápidamente nos fuimos al MBK, famoso por su zona de copias de prendas de marca y su inmensa cantidad de establecimientos de electrónica, joyas, ropa…
En el food center
Pasamos el resto de la tarde paseando por las galerías, con ganas de visitar diversas tiendas, regateando algunos precios, descubriendo los objetos que ofrecen… Acabamos en el food center una zona destinada a comer, con varios puestos alrededor de unas mesas, donde ofrecían todo tipo de comida.
No es demasiado caro. Al entrar pagas en una garita donde te dan una tarjeta con la cantidad de dinero que has abonado. A medida que pides te van descontando el precio de los platos y las bebidas y antes de irte pasas por un mostrador donde te devuelven la diferencia.

¡Feliz día! J

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