Una reflexión matutina
¡Buenos
días! El sol vuelve a iluminar la mañana, el cielo tiene un azul intenso que
brilla con fiereza para iniciar un día cargado de emociones y estoy contenta.
¡Por fin viernes!
Hoy
colgaré el post y cerraré el blog por
mini vacaciones, ¡tres días libres! Es un lujo descansar sin obligaciones…
Aunque la verbena de San Juan se presenta desierta de amistades… Este año
nuestros amigos de verbena no la celebrarán, después del incendio del año
pasado han decidido pasar la velada en casa, sin sobresaltos.
Creo
que compraremos cuatro petardos y llevaremos a los niños a tirarlos por ahí.
Como es el santo de mi marido podemos preparar una gran cena, conversar en la
mesa, reír y disfrutar de una noche mágica. ¡Dicen que es el día de purificar
las energías!
Ayer
por la noche no teníamos niños, los dos están de colonias para despedir el
curso. Como los jueves es el día del espectador en unos cines de mi ciudad y
las entradas cuestan 4,5 euros, miramos la cartelera dispuestos a ir a la sala,
pero no encontramos ninguna película que nos llamara la atención, así que
decidimos ir a tomar algo.
Cogimos
la moto y nos fuimos a un restaurante de tapas nuevo que me recomendó mi padre.
Eran las nueve treinta y estaba lleno… No me lo podía creer, con la crisis que
hay… Caminamos por los alrededores para descubrir algún local interesante… ¡La
verdad es que me parece increíble que haya tanta diversidad de restaurantes por
metro cuadrado!
Lo
curioso del caso es que muchos estaban vacíos. Está claro que esa cantidad de
locales hace imposible que exista un reparto equitativo de comensales.
Últimamente pienso que hay demasiado de todo y eso agrava la crisis. Antes las
personas que deseaban probar suerte como empresarios montaban una tienda, ahora
los bares y restaurantes son el negocio de moda. ¡Cada día abren varios!
Cerca
de mi casa este último mes han visto la luz tres bares distintos en lugares antes
ocupados por tiendas. Los hay monísimos, con carta de tés, como a mí me gusta.
Pero, ¿pueden convivir con tanta competencia?
Yo
entiendo la crisis como un estado económico en el que no hay para todos. Así
que la gente se reparte tal como vi ayer por la noche: copan unos locales y
dejan vacío el resto. ¿Dónde radica la clave del éxito? ¿Por qué el restaurante
de enfrente está lleno?
En
fin, no voy a arreglar el mundo… No escribiré hasta el martes, así que quiero
desearos un feliz fin de semana y una gran verbena.
¡Feliz
día! J
FELIZ sanviernes, FELIZ fin de semana (largo) y hasta el martes :-)
ResponderEliminar¡Un beso Pilar! :-)
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