Tarta de manzana
¡Buenos
días! El miércoles empieza con mucho trabajo y muchas ilusiones. Me parece que
el día no acompaña, pero estoy decidida a no perder la sonrisa a pesar de la
cantidad de cosas que me quedan por hacer.
Ayer
no escribí, me dediqué a cocinar y a comprar los ingredientes para la
demostración de la Thermomix del
viernes. Viene la vendedora a casa a explicarme cómo van algunas cositas. ¡Me
hace muchísima ilusión! Le voy a preguntar mil cosas y a anotarme los trucos
que me enseñe para utilizar más la máquina, aunque no me puedo quejar, no he
parado de preparar manjares con su ayuda desde que la tengo.
Cocinar
me relaja muchísimo, es una manera de distraerme y de no tomarme las cosas
demasiado a pecho. Por suerte la vida es preciosa y consigo sacarle emoción a
las situaciones cotidianas. Ayer preparé un pastel buenísimo de manzana para
mis compañeros de la oficina, ¡me encanta trabajar con ellos! Por eso les
prometí esta tarta de bizcocho con manzana. ¿A que tiene buena pinta?
Tengo
una idea para la próxima novela, espero que al estirar del hilo consiga plasmar
en el papel algo diferente a lo que he hecho hasta ahora… Jajajajajaja, esa es
mi propuesta cada vez que empiezo a escribir y mi cabeza acaba sucumbiendo a
algunas premisas.
Intentaré
que esta vez la escritura se alargue en el tiempo para investigar y crecer con
los personajes. En los últimos manuscritos he logrado una profundidad
importante en los caracteres del elenco de personas que circulan por las
páginas, y creo que estoy preparada para darle vida a algo más trascendental,
con una historia intensa detrás de la trama.
Mientras
encuentro tiempo para terminar EDP y corregirla, maduraré esta idea. A ver si
encuentro la senda de las palabras para conseguir mi propósito. En EDP he
logrado unas tres cuartas partes de lo que intentaba, así que poco a poco integro
nuevos elementos a las historias.
¡Feliz
día! J
Pronto serás una experta en el arte de cocinar ,aderezar y presentar tus historias tal como si fueran esos dulces tan suculentos que preparan tus beatíficas manos.
ResponderEliminarJajajaja, ¡a ver si es verdad! :-)
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