¡Cambios a la vista!
¡Buenos
días! Me levanto con resaca de sueño… Uffff, ayer fue un día intenso, con
momentos mágicos y revelaciones. ¡Últimamente parezco la protagonista de una de
mis novelas! Jajajajaja, con tanta novedad y una perspectiva de cambio
importante soy igualita que ellas.
A
veces tomo decisiones en caliente, llevada por la emoción del momento, y luego
necesito unas horas para recapacitar. Sé que tomé la decisión correcta, que mi
camino se traza en una única dirección, no tengo dudas ni recelos, hay veces en
los que has de arriesgarte.
Tras
una comida perfecta, con un montón de emociones, me fui directa al despacho
para entrar en una reunión. Me pasé una hora y media cuadrando balances y
preparando un business plan para los próximos diez años. Mi cabeza estaba en
los números, por eso no me paré a pensar en ningún momento en las connotaciones
de lo que acababa de oír.
Del
trabajo me fui directa a casa, preparé la bolsa del gimnasio, ayudé a mi hija
con unos deberes, hablé un ratito con mi madre y me subí a la moto para asistir
a mi clase de baile de las 17:30. Fue genial cuando llegué a la sala, me puse
en mi sitio y mis compañeras me dijeron en broma que si no mantenía el
entusiasmo hasta el final me enviarían a la última fila. Jajajajajaja, a veces,
cuando me canso, hago los movimientos de manera menos marcada.
Divertida
con la guasa empecé a bailar cuando Fran puso la música y se situó a mi
izquierda. Y me dejé llevar. Fue entonces cuando procesé las palabras del
mediodía. Ya lo sé, soy de efectos retardados y necesito espacio para repasar
desde todos los ángulos posibles las situaciones, y para hacerlo necesito la
perspectiva de las horas.
Los
nervios que durante un par de horas se habían mantenido a raya explotaron
entonces, mientras bailaba y sonreía para que no me mandaran a la estratosfera
de la clase. Comprendí sin dificultad que mi decisión era la más acertada, que
me encantaría emprender una aventura de la mano de alguien a quien conozco hace
muchos años y que solo el destino puede juzgar si me equivoco. Aunque yo creo
que no, que en la vida hay que arriesgarse y no contentarte con esperar.
¡Por
suerte mis compañeras al final me aprobaron! Y yo me fui contenta a casa, con
la sensación de caminar por un suelo firme, sin las angustias del pasado ni la
necesidad de respuestas. ¡No sabéis cómo me gustaría que mi vida sufriera un
cambio parecido! Iniciar una aventura llena de ilusión, con aquellas ganas de
comerse el mundo y el aplomo que te da la experiencia.
¡Estoy
segura de que será un éxito! Y quién sabe qué me tiene preparado el Cosmos…
Ufffff, de momento la reunión económica de los jueves, aprobar presupuestos,
preparar pagos, acabar de cuadrar el buisness plan, preparar la auditoría del
jueves que viene, tomar decisiones referentes a la tesorería… ¡Vamos, un
planazo! Suerte que por la tarde hay clase con Alberto…
¡Feliz
día! J
Me he perdido un trozo, pero contenta de leerte feliz!!!
ResponderEliminarBeso
Te lo has perdido todo... ¡Luego te escribo un privado! hay cosas que no se pueden gritar a los cuatro vientos hasta que están atadas
Eliminar