Resaca de pensamientos
¡Buenos
días! El tiempo oscila entre el frío y el calor, hay momentos de sol y momentos
de lluvia… Yo me he despertado un poco estresada, hay demasiadas cosas que me
impiden a veces sonreír y debo aprender a relativizarlas…
Yo
creo que hay instantes en los que me detengo a pensar porque no tengo la mente
ocupada en algo más interesante y me descubro con carencias en algunos aspectos
de mi vida laboral. Recuerdo entonces esos sueños infantiles a los que aspiraba,
esa alegría intensa al pensar que los conseguiría.
Lo
sé, es absurdo pensar que tu vida únicamente deba dirigirse en una dirección y
que me prometí a mí misma no regresar al punto de inflexión que cambió mi
visión del ahora. También soy consciente del grado de frustración al que llegué
tras intentar alcanzar las metas trazadas sin éxito.
No
voy a dejarme llevar por la melancolía ni por la ansiedad, sencillamente hay
algunos factores externos que a veces me hacen recapacitar y darme cuenta de
qué es lo importante y qué lo superfluo.
La
paciencia no es mi fuerte, lo admito. Me cuesta muchísimo esperar
acontecimientos con tranquilidad, quizás por eso ahora que estoy en un impás donde las cosas han de acabar de
asentarse me siento más inquieta. Aunque yo creo que terminar la tercera novela
en diez meses tiene su parte de culpa.
Cuando
las últimas palabras de una novela se plasman en el papel yo me quedo vacía,
sin que mi mente esté llena de ideas locas, de tramas, de cabos sueltos. Es
como si me quedara sin aliento, sin un motivo por el que continuar respirando. Y
entonces le doy vueltas a otras cosas, dándome cuenta de mis sensaciones, mis
anhelos y mis angustias.
Hoy
parece que hará sol. El frío se insinúa en mi ventana al tocar el cristal con
la mano. Hace un viento suave que arrastra las hojas de mi terraza y produce un
movimiento rítmico. La casa duerme, apenas se escuchan ruidos, y yo suspiro con
las ensoñaciones en la mente.
¡Qué
bonito sería adaptar mi vida a esos sueños! Despertarse por la mañana con la
única obligación de llenar los folios con palabras, dejarse llevar por la
imaginación a mundos lejanos donde no hay esquemas ni orden ni rutina, caminar
de la mano de los personajes y de las tramas…
Pero
la realidad es otra, una de la que no puedo evadirme. Hay demasiadas
obligaciones y responsabilidades, demasiados obstáculos para empezar de cero.
Así que ahora mismo me voy a ir a la oficina a enfrentarme con mis tareas con
una sonrisa. A pesar de los pesares.
¡Feliz
día! J
Caray , Pat , a veces pareciera que este blog , por lo común animoso, jovial ,deportivo y dicharachero ,funciona también como un altar sangriento de tus emociones ,en donde desollas la piel de tus sentimientos , desgarrandolos al punto de hacer visible tus vivas y, sin embargo, agonizantes entrañas ; pero a todo este salvaje y aparentemente desagradable sacrificio se impone el heróico y conmovedor estoicismo de una reina ,de nuestra reina , o sea de ti ;mi reina ,que aunque los ánimos no sean los mejores para escribir , te las arreglas para hacerlo, y de paso darnos una lección de constancia , de coraje y de amor por lo que haces .mil gracias por el ejemplo .
ResponderEliminar