Mil cosas en la cabeza
¡Buenos
días! Hace frío, brrrrrrr, un poco más y no salgo de la cama, ¡con lo bien que
se está tapadita! Suerte que hoy es viernes, que la jornada laboral es más corta
y que tengo dos días por delante para descansar.
No
estoy inspirada, tengo mil cosas en la cabeza y apenas tengo tiempo para pensar
en qué poner en el post. Hay mañanas en
las que me despierto espesa y necesito concentrar mi energía en las horas de
oficina para conseguir que todo salga como es debido.
He
iniciado mis nuevos proyectos, sin prisa, pero sin pausa. Quiero ver la vida
desde un prisma diferente, saber hacia dónde conducen mis pasos vacilantes, dar
rienda suelta a las oportunidades. No todo se reduce al mundo literario, en mi
vida existen muchos factores que pueden arrancarme una sonrisa.
Recibir
mi nuevo contrato con la agencia fue algo maravilloso. Aunque debo poner las
cosas en su lugar, de momento es una declaración de intenciones, un «creo en
ti, vamos a intentarlo», y solo el tiempo puede decidir qué sucederá con la
serie Estrada o con una novela a secas. Así que debo mantenerme serena y con la
cabeza bien asentada sobre los hombros, sin lanzar cohetes al viento ni esperar
a que algo mágico suceda. Es posible que este cambio solo signifique una brizna
de aire fresco mientras la realidad continúa sin demasiados cambios.
Mi
trabajo remunerado llena muchísimas horas de mi día, es absorbente y de alto
grado de responsabilidad. Y esa faceta de mi vida también es importante, hay
que mimarla, dejarla crecer, acompañarla en el proceso y saber hasta dónde
requiere de mi concentración.
No
es fácil gestionar a la vez cinco empresas y una fundación, a veces busco una
cuenta en la contabilidad y al cabo de un rato me doy cuenta de que me he equivocado
de empresa. Siempre tengo un montón de papeles y cosas sobre la mesa, he de
solucionar temas diversos y no puedo dispersarme si mi intención es ser
eficiente. Por eso dedico energías, ilusión, horas y ganas a que el trabajo
salga sin dificultad.
Creo
que hoy voy a dejar de escribir aquí, ya os he dicho que no tengo la cabeza
despejada, quizás mañana esté más inspirada…
¡Feliz
día! J
Con el descanso del fin de semana te volverá la inspiración. ¡Seguro!
ResponderEliminar¡Seguro que sí!
EliminarCuando no tengas ganas de escribir ;escribe . escribe sobre tu bloqueo , tu desgano , tu fastidio o tu irritación ; porque escribiendo, tal vez, logres disipar de tu atmósfera mental o emocional todos esos sentimientos negativos que conspiran contra tu felicidad .exorcizalos mediante el poder de tu talento .literaturiza tus aventuras , tus victorias , tus derrotas , tus afectos etc , etc ,etc en aras de la infinita satisfación que experimentan tus seguidores cada vez que te leen .
ResponderEliminarEso haré… ¡Feliz día! :-)
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